Las próximas elecciones del mes de octubre deberían ser la oportunidad para que los partidos políticos y los movimientos regionales se consoliden como opciones políticas en las regiones, la oportunidad para construir alianzas y fortalecer la identidad que tuviera cada una, la oportunidad para la afirmación de liderazgos sobre la plataforma de propuestas, de modo que las elecciones no fueran sino una oportunidad para elegir programas de gobierno y no sólo a personas carismáticas o de recursos económicos persuasivos.
ABRIENDO CAMINOS
Desde el bosque. A veces no encuentro más que oquedades, agujeros profundos en la tierra.
jueves, 6 de marzo de 2014
“PODER ANDINO” EN PUNO
Las próximas elecciones del mes de octubre deberían ser la oportunidad para que los partidos políticos y los movimientos regionales se consoliden como opciones políticas en las regiones, la oportunidad para construir alianzas y fortalecer la identidad que tuviera cada una, la oportunidad para la afirmación de liderazgos sobre la plataforma de propuestas, de modo que las elecciones no fueran sino una oportunidad para elegir programas de gobierno y no sólo a personas carismáticas o de recursos económicos persuasivos.
martes, 30 de julio de 2013
sábado, 16 de febrero de 2013
ESPERANDO A LOS BÁRBAROS
Los textos dicen más de lo que sus autores quisieron decir. Parece una regla. A veces no dicen o dicen menos, pero eso depende de la creatividad del autor o de la imaginación del lector. Cuando se lee un texto, una novela por ejemplo, parece que uno se enfrenta a una suerte de revelación. El autor dice de diversas maneras algo y buscaría con ello conmovernos en algún sentido. Escribir entonces pone al autor, como al lector, en una supuesta misma dirección. Pero, supongo que para nadie es un secreto que los textos se despliegan en múltiples y diversas direcciones y que los lectores recorren así diversas sendas, incluso algunas que podrían ser reveladoras para el propio autor del texto. El lector recrea el sentido del texto y revela otra realidad, o verdad, o sentencia a su autor.
Ocurre entonces que los textos literarios, y aquí estoy hablando de la novela, no se pueden interpretar en un solo sentido. No habría que rasgarse las vestiduras por el error de interpretación de aquel o el propio. En un texto literario parece que - y no siempre ocurre - la palabra se manifiesta, habla ella sola, y de tal modo que deja ser al lector, quien a fin de cuentas halla una vinculación especial entre la obra y su persona, que no es ya, como quizás alguien pensó, entre el autor y su persona.
Las obras literarias tienden a separarse de sus autores, tienden a adquirir vida propia. Y en ese sentido, quizás, esté bien decir que los escritores son “creadores”. Y es evidente también, para mí ahora lo es, que una obra literaria tiene un efecto en la realidad al punto que la modifica, y esas obras que modifican la vida de un lector, ya son obras propias de un “creador”. Es cierto, hay novelas que no dicen nada, no hacen nada, y sólo ocupan un lugar en el espacio. Dios nos libre de ser creadores de fenómenos así.
No es el caso de “Esperando a los bárbaros” de Coetzee.
jueves, 8 de noviembre de 2012
EL “MOVADEF” Y LOS RETOS DE LA EDUCACIÓN PARA LA DEMOCRACIA
¿Por
qué el MOVADEF es hoy un organismo significativamente peligroso para la
sociedad? ¿Qué circunstancias han operado en el pasado reciente para que este
grupo, de modo sorprendente para quienes vivimos la tragedia peruana de los
80’s y 90’s, con inusitada libertad y desparpajo cuestione nuestra memoria,
expanda la predica del odio como si nada hubiera pasado? ¿Por qué nos sorprende
que a veinte años de haber sido capturado Abimael Guzmán, el cabecilla del
grupo terrorista “Sendero Luminoso”, terroristas que sistemáticamente violaron los
derechos humanos de millones de peruanos, el MOVADEF exijan su excarcelación,
invocando una suerte de amnesia sin consideración alguna por todos los que
sufrimos aquellos años, especialmente sin respeto alguno por los deudos de su
odio?
Hay
algo que en estos veinte años no se hizo o se hizo mal. Un organismo civil que
desafía nuestra capacidad de indignación y se ha colocado en el escenario
político provocando incluso la renuncia del embajador Lynch en Argentina, no
podría operar así si no fuera porque el Estado peruano, las instancias
democráticas y en general, la comunidad política peruana no han logrado aún
establecer la armonía social al tiempo que generar condiciones para la justa
apropiación de la historia reciente. Estos procesos ni se han desplegado ni se
han interrelacionado de modo suficiente en nuestro contexto.
viernes, 7 de septiembre de 2012
PARA PENSAR EN LA "PERSONA" DE LOS DERECHOS HUMANOS
Los derechos humanos han nacido de alguna manera con el advenimiento de la modernidad. Ellos son en gran parte fruto del grito de libertad de las nacientes repúblicas de fines del siglo XVIII. Pero es claro que los ideales que los sostienen no serían tales si no hubiera tras ellos una historia de ideas y concepciones de la vida y del hombre que remiten a un mismo horizonte de comprensión: el pensamiento cristiano medieval.
Los
derechos humanos, los derechos fundamentales o los derechos morales, como
quiera uno formularlos, están referidos al hombre y a la concepción que se ha
tenido del mismo, desde antiguo hasta el presente. Pero es la tradición
cristiana que concibe al hombre como persona la que fundará teóricamente la
historia filosófica de los derechos humanos. Con el cristianismo y su
comprensión del hombre es que se abre el horizonte de comprensión de la
dignidad, un concepto heredado por la modernidad y especialmente fundamental
para la teorización de los derechos del hombre.
domingo, 2 de septiembre de 2012
AUTENTICIDAD EN LOS MÁRGENES DEL "EGO"
Hace mucho tiempo que no volvía sobre los conceptos tradicionales de "yo" y "sí mismo". Regularmente asumimos que somos de alguna manera un yo. Nos ubicamos en la realidad a partir de este yo conformado por lo que a primera mano tendríamos frente a nosotros mismos. Yo soy el cuerpo que tengo, por ejemplo. Y esto, no obstante ser una afirmación recurrente a la hora de percibirme, no deja de ser inexacto. Pues, el cuerpo no se tiene, uno también es su cuerpo. Pero, aquí es cuando podría iniciarse la conciencia de la distinción entre el yo y el sí mismo. Pues el yo, parece ser una suerte de fantasía, tal y como la habría descubierto Hume en su momento, pero por otras razones, o tal y como lo encarara Freud, y también por otras razones. El yo, de quien he de cuidarme de hacer afirmaciones radicales, pues las mismas podrían provenir del mismo yo, manifiesta desde un inicio una fascinación por sí mismo. No obstante, el encuentro con sí mismo permanece postergado, porque lo que impulsa su hacer es precisamente la cantidad de notaciones, adjetivos y características, que como bajo una lluvia ha venido a caer sobre uno desde el momento en que accede al lenguaje y el otro lo mira y le dice, o afirma cosas de este uno.
sábado, 1 de septiembre de 2012
SOBRE HÉROES Y SANTOS.
La santidad como la heroicidad no
tendrían que devenir de lo que digan las instituciones. En el caso de la
santidad, hasta donde sé, no se niega a nadie que crea en Dios firmemente. Si
la institución es santa, santos serán los nombramientos que confieren a los
hombres de vida recta y ejemplar. Pero, parece que se equivocaron algunas
veces. Quizás no tanto al reconocer a uno por santo, sino por el tiempo en que
se demoraron. Pero, como son cosas de Dios, es difícil saber en qué hubo error,
y lo más probable es que uno esté totalmente equivocado en sus pareceres.
Más difícil es el nombramiento de
los héroes. Por un lado, parece que las
instituciones no son las llamadas a determinar quién es héroe. Al hacerlo sin
duda tenemos un modelo de vida, un hombre cuya vida nos invita a imitarla pues
es la personificación de virtudes. Es la muestra evidente de lo que a los
hombres se les hace difícil de alcanzar y que sin embargo, si todos fuéramos
como ellos, la vida no sólo sería buena, sino que el mundo sería mejor.
lunes, 6 de agosto de 2012
ÉTICA Y POLÍTICA
La
comprensión de la política puede no tener en consideración los criterios éticos
que alguna vez se pensaron inalienables del quehacer político. Hoy no es de
suyo evidente que ética y política mantengan una relación consubstancial. Pero
hay una insistencia sobre su conexión. Una insistencia que se entiende como una
demanda de “más ética en la política”.
A
qué viene el estado de cosas en que tal demanda se ha extendido hacia otras
áreas de la praxis humana como la economía, las ciencias o el arte. Quizás se
esté pensando en la ética como en un dispositivo que haría más puras a las
ciencias, más benignas, menos agresivas
y dañinas. De modo que hasta sería útil tal dispositivo. Y si decimos
que “hasta sería útil” es porque parecería que bajo esta comprensión de la
ética y de las ciencias, estas últimas se las arreglarían bien con o sin ética.
¿Cómo
se ha pensado la política como para que la ética parezca una suerte de
apéndice, a veces innecesario? ¿Desde cuándo la política tiene poco o nada que
ver con la ética? ¿Es justificable este modo de proceder toda vez que se hace
patente la demanda de ética para la política? ¿Qué se demanda cuándo se demanda
ética? El modo político de proceder en el presente, ¿es tal que carece de ética
de modo absoluto?
martes, 3 de enero de 2012
"Sociedad Civil", una promesa moderna.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)